Enfermedades de Trasmisión Sexual
Las enfermedades de transmisión sexual son infecciones que se contagian de una persona a otra ususalmente durante el sexo vaginal, anal u oral. Son muy comunes, y muchas personas que las tienen no presentan síntomas. Sin tratamiento, las ETS pueden causar serios problemas de salud. La buena noticia es que hacerse la prueba no es complicado y que la mayoría de estas enfermedades son fáciles de tratar.
La urología femenina se encarga del diagnóstico, el tratamiento y la revisión de las enfermedades que se desarrollen en el sistema urinario y en el suelo pélvico de las mujeres. Los urólogos determinan las causas que provocan la enfermedad, estudiando cada caso en particular, realizando un diagnóstico y aportando, finalmente, una posible solución adecuada para cada paciente.
¿Cuáles son los síntomas?
Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) o las infecciones de transmisión sexual (ITS) pueden tener diversos signos y síntomas, incluso la ausencia de síntomas. Es por eso que pueden pasar desapercibidas hasta que ocurren complicaciones o hasta que se diagnostica una pareja. Los signos y síntomas que pueden indicar una infección de transmisión sexual incluyen los siguientes:
- Llagas o protuberancias en los genitales o en la zona oral o rectal
- Dolor o ardor al orinar
- Secreción proveniente del pene
- Flujo vaginal inusual o con olor extraño
- Sangrado vaginal inusual
- Dolor durante las relaciones sexuales
- Dolor e inflamación de los ganglios linfáticos, particularmente en la ingle, aunque a veces más extendidos
- Dolor en la parte inferior del abdomen
- Fiebre
- Erupción en el tronco, las manos o los pies
Los signos y síntomas pueden aparecer unos días después de la exposición, o pueden pasar años antes de que tengas algún problema perceptible, según cada organismo.
ETS más comunes
- Clamidia
- Herpes genital
- Gonorrea
- VIH y sida
- VPH
- Ladillas
- Sífilis
- Tricomoniasis